Celebración de Santa Rita de Casia

Tuvo lugar esta tarde la celebración de la Fiesta de Santa Rita de Casia en la parroquia.

Santa Rita de Casia dejó que Dios regara su vida, de forma que los frutos abundaron en ella. Esto lo hizo amando la Sabiduría, el Espíritu Santo, Dios mismo, "la Sabiduría instruye a sus hijos y cuida de aquellos que la buscan. El que ama la Sabiduría, ama la vida; el que madruga para encontrarla, será colmado de gozo; el que la abraza, heredará la gloria y recibirá la bendición del Señor en todo lo que emprenda" (Libro del Eclesiástico 4,12ss). Y esto fue lo que le pasó a Santa Rita, mujer ejemplar, vivió durante toda su vida con fidelidad a Dios: de soltera, de novia, de casada, de viuda y por último como esposa de Jesucristo, con las hermanas agustinas.

Manifestó un gran amor por la Iglesia, expresada en su obediencia al Santo Padre; un gran amor por la iglesia como cuerpo de Cristo, expresado en la fraternidad con sus hermanos; y un gran amor por la Cruz de Jesucristo, a la Pasión de Jesús.

La fama de su santidad pasó los limites de Casia. Las oraciones de Rita obtuvieron prodigiosas curaciones y conversiones. Para ella no pidió sino cargar sobre sí los dolores del prójimo. Murió en el monasterio de Casia en 1457 y fue canonizada en el año 1900.

Santa Rita intercede por nosotros ante el Padre pero, como todos los Santos, está ahí también para que nos sirva como modelo a imitar en nuestro caminar, en medio de las dificultades y pruebas de la vida, y esto no hay que olvidarlo.

Con multitud de fieles que mostraron su devoción a la santa, al finalizar la eucaristía se repartieron los bollos y la rosa de Santa Rita a todos los asistentes:

• los bollos como recuerdo de los que Santa Rita daba a los pobres
• las rosas, signo del amor de Cristo a Santa Rita y de la capacidad de ella de interceder por las causas imposibles.

D. Félix, nuestro párroco, invitó a todos a formar una cofradía bajo la advocación de la santa para la que ya tiene la medalla.