Catequesis

La catequesis ha de ser activa, eficaz y capaz de educar en una fe robusta a las generaciones cristianas de estos tiempos. El Papa Francisco, en el discurso a los participantes en el Congreso Internacional sobre Catequesis que tuvo lugar el pasado mes de Septiembre en Roma, manifestó que la catequesis es un pilar maestro para la educación de la fe.

El Catecismo es el instrumento por excelencia de la Catequesis, por lo que ha de llegar a manos de sus destinatarios en su integridad, en el momento oportuno, y especialmente en el acto catequético mismo.

Comenzaremos enseñando a los niños que ser cristiano es amar a Jesús y que a Jesús lo conocemos en la Iglesia. Somos cristianos porque seguimos a Jesús y hemos recibido el Bautismo. Todos los cristianos formamos una gran familia, la familia de los hijos de Dios, la Iglesia.

Se irán explicando las señales que distinguen a los verdaderos cristianos:

• El amor a Dios y a los demás, como Jesús nos enseñó
• El domingo, que es el Día del Señor, es el día en que nos reunimos todos sus discípulos.
• Los Mandamientos del Señor, que orientan nuestra vida, nos ayudan a seguirle.
• El Padrenuestro, que es la oración que Jesús nos enseñó.
• La Cruz, que es la señal del cristiano porque muestra el gran amor de Jesucristo a todos los hombres y a su Padre, Dios.

En las catequesis no sólo se aprenderá teoría, sino que vamos a profundizar en el mensaje de Jesús y a vivir la vida nueva de los hijos de Dios. Por eso, animaremos a los niños y niñas a:

• Aprender a pedir perdón a los padres, abuelos, hermanos o amigos cuando hagan algo que esté mal.
• Asistir en familia a la Misa del Domingo.

También aprenderemos las primeras oraciones cristianas, que nos ayudan a establecer una relación personal y de amistad con Jesús. Estaría bien que la familia ayudara a los niños a repasarlas en casa y, sobre todo, a rezarlas con devoción, en la seguridad de que Jesús participa en ese momento.